En medio de los operativos de inspección y control registrados por este medio, se desató el pánico por un incendio en la etapa III de Torrentes.
Mientras las autoridades se encontraban ingresando a los diferentes conjuntos residenciales, la llamada de auxilio se hizo presente. En el segundo piso de una de las torres, un apartamento empezó a emanar humo; producto de una conflagración que se originó aparentemente, por un corto del cableado interno.
De inmediato, ante el desespero de los vecinos, las autoridades y residentes con extintor y manguera en mano acudieron a apagar las llamas. Casi 30 minutos fueron empleados por policía y comunidad para controlar las llamas que acabaron con una de las habitaciones del apartamento. Fue necesario forzar la entrada para poder atender la emergencia, ya que la mujer que habita el apartamento, se encontraba trabajando.
Un televisor, dos camas, cobijas, ropa, entre otros fueron las pérdidas del siniestro. Además de los vidrios que tuvieron que romperse para ventilar el lugar. Por fortuna, no se registraron afectaciones humanas o animales.