El pasado martes 19 de octubre, se llevó a cabo la condena por parte de la juez 19 penal de Bogotá, donde condenó al coronel Nelson de Jesús Arévalo, al teniente Rósemberg Madrid Orozco, al intendente Juan Carlos Leal, a los patrulleros Fleiber Zarabanda y Wilmer Alarcón, de igual manera al asesor jurídico de la Policía de Bogotá, Héctor Ruiz, debido a la alteración de la escena del crimen, donde fue asesinado el joven grafitero de 17 años, Diego Felipe Becerra. Los cargos por los que fueron condenados son fraude procesal, falsedad en documento, ocultamiento y destrucción de material probatorio, fabricación, porte y comercialización de armas y favorecimiento al homicidio. A su vez, se conoció que la versión presentada por los uniformados, en la cual indicaban que el joven había intentado robar un bus y que por esa razón se había dado una persecución para luego disparar en su contra, fue una alteración por lo que los agentes, colocaron un arma de fuego en el sitio indicando que sería del joven grafitero. Mientras tanto, la juez indicó que el coronel Arévalo, tenía conocimiento de los hechos y avaló que se colocara el arma de fuego en el lugar, mientras que el abogado Ruiz, ideó un plan para que el proceso en contra de los agentes no se llevara a cabo. El subintendente Nelson Tovar en el año 2015 habría aceptado participar en el montaje y haber conseguido el arma que se colocó en el lugar, por lo que se le condenó a ocho años de prisión con beneficio de casa por cárcel, mientras que el patrullero Alarcón fue condenado en el año 2017 a 37 años, 6 meses y 1 día de prisión, pero se encontraba prófugo de la justicia hasta el pasado 22 de agosto, cuando fue capturado por agentes del Gaula y el CTI.
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